¡Bienvenidos a nuestro blog! En este artículo vamos a hablar sobre los ejercicios para la mano después de una fractura. La recuperación de una fractura en la mano es crucial para restaurar la fuerza y movilidad. Aquí encontrarás una serie de ejercicios recomendados por fisioterapeutas que te ayudarán en el proceso de rehabilitación. ¡Sigue leyendo para conocer más!
Índice de contenidos
Ejercicios de movilidad
Los ejercicios de movilidad son fundamentales en la recuperación de una fractura en la mano. Es importante realizar ejercicios de flexión y extensión de los dedos, así como también de abducción y aducción del pulgar. Estos movimientos ayudarán a recuperar la amplitud de movimiento y disminuir la rigidez en la articulación afectada.
Fortalecimiento muscular
El fortalecimiento muscular es esencial para recuperar la fuerza en la mano. Ejercicios con resistencia progresiva, utilizando una pelota suave o un dispositivo de fortalecimiento específico, pueden ayudar a recuperar la fuerza en los músculos de la mano y el antebrazo. Es importante trabajar tanto los músculos intrínsecos como extrínsecos de la mano.
Entrenamiento sensoriomotor
El entrenamiento sensoriomotor se enfoca en mejorar la coordinación y la propriocepción en la mano. Esto puede lograrse mediante ejercicios que involucren el uso de utensilios de cocina, herramientas pequeñas o simplemente manipular objetos de diferentes formas y tamaños. Esto ayudará a recuperar la destreza y coordinación de la mano afectada.
Terapia de compresión y descompresión
La terapia de compresión y descompresión consiste en aplicar presión controlada sobre la mano para mejorar la circulación sanguínea y reducir la hinchazón. Esto puede realizarse mediante el uso de vendajes o dispositivos de compresión específicos. Posteriormente, es importante realizar ejercicios de descompresión, como la apertura y cierre repetido de la mano para promover la circulación adecuada.
Actividades funcionales
Una vez que se ha recuperado la movilidad y fuerza en la mano, es importante incorporar actividades funcionales en la terapia. Estas pueden incluir tareas cotidianas como abotonar una camisa, escribir a mano, cortar alimentos o tareas laborales específicas. El fisioterapeuta guiará al paciente en la realización progresiva de estas actividades para reintegrarse de manera segura a sus actividades diarias.
